¿Quién cuestiona?
STALIN GONZÁLEZ | EL UNIVERSAL
26 de enero de 2009
Los jóvenes que vivimos en el país que
ellos mal gobiernan, decimos otra
vez que NO
Jesse Chacón -a propósito de la manifestación
realizada por los estudiantes de la Universidad Metropolitana- declara con no
poca ligereza que "en Venezuela está garantizado el derecho a la protesta,
pero esa protesta no puede ir en contra de los ciudadanos". Padece el
ministro de poca memoria, y de ceguera. Cabría preguntarle al ministro si no se
ha percatado cómo ha incidido en los venezolanos su "supuesta
protesta" contra el imperialismo, si no ha visto como día tras día los
ciudadanos nos vemos afectados de forma directa por la inseguridad, que
definitivamente no encuentra coto y que no es parte de protesta alguna. No,
claro que el ministro no lo ha visto, y es que después de la cadena de más de
siete horas del presidente de hace unos días entendimos que los oficialistas
viven en otra Venezuela, una en donde no hay niños en la calle, donde la
inflación no afecta el bolsillo de nadie, donde Petare es parte de la
oligarquía, una Venezuela donde a pesar de haber dicho que NO, seguimos en el
jueguito de un presidente que se siente extremadamente querido, y por ende es
capaz de "hacer el sacrificio" de gobernar per secula seculorum.
Es así como un gobierno que hasta los momentos no
ha dado grandes muestras de ser eficiente, intenta mimetizarse con el sentir
popular a partir únicamente de la retórica. Pues, de nuevo, los jóvenes que
vivimos en el país que ellos mal gobiernan, y que sí vemos y padecemos de los
males que en sus calles ellos no ven, decimos otra vez que NO. El 2D de 2007
los venezolanos no sólo rechazamos la reforma; ese NO tenía una lectura
muchísimo más amplia: ese día rechazamos un sistema que ni siquiera cuenta con
definición propia, un sistema que carece de coherencia alguna, y que además se
aleja de la esencia del pueblo. Hoy, de nuevo, pese a las amenazas del presidente,
pese al "gas del bueno", saldremos a protestar y seguiremos de forma
pacífica defendiendo el principio de alternabilidad y esa democracia que a
quienes están el gobierno tanto les incomoda.
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