Movilidad pendiente
STALIN GONZÁLEZ | ULTIMAS NOTICIAS
08 de Julio de 2011
Hemos tenido una semana donde los problemas
principales que vivimos los caraqueños se han visto desplazados por los sucesos
que rodean la crisis carcelaria que se vive en el Rodeo.
Hemos tenido una semana donde los problemas
principales que vivimos los caraqueños se han visto desplazados por los sucesos
que rodean la crisis carcelaria que se vive en el Rodeo, y más allá de
solidarizarnos con una realidad que nos arropa a todos, entendiendo el
conflicto dentro de una situación de inseguridad, indefensión y vulnerabilidad
del Estado frente a los ciudadanos cualquiera que sea su situación, no podemos
dejar de lado la realidad que día a día afecta de manera directa a los
ciudadanos que no viven sino que padecen la ciudad que tenemos.
Tenemos semanas atacando uno de los problemas que
-de acuerdo a los estudios de opinión- se encuentra entre los primeros tres que
afectan la vida de los habitantes de nuestra urbe, la movilidad, en sus diferentes
elementos. Hemos tratado el tema del Metro de Caracas como una de nuestras
mayores preocupaciones en tanto este es el primer sistema de transporte público
masivo y que ha venido presentando una serie de dificultades que han hecho el
uso del mismo insoportable para aquellas personas que no poseen automóvil.
Hemos tocado el tema del BusCaracas, una de las promesas incumplidas por varias
instituciones que han tenido a cargo la responsabilidad de adelantar un
proyecto que ha sido presupuestado mil veces y financiado otras tantas, sin
contar hasta ahora con un monto específico y certero de cuánto ha sido la
"inversión" en este sistema, que no está de más decir, ya estaba
planificado como una de las líneas que tendría el subterráneo. En fin, hemos insistido
de forma muy tajante en este problema, entre otras cosas porque no hay nada que
moleste y malhumore más a los caraqueños que las mil horas perdidas en el
tráfico, que lo terrible de montarse en el Metro sin aire acondicionado,
parado, hacinado con mil personas más que intentan controlar su psiquis para
poder llegar a su trabajo una vez culminada esta situación.
Nuestro sistema padece de unidades que tienen más
de 15 años en funcionamiento, no poseen un criterio único, ya que cada
transportista responde a sus intereses particulares y pocos son los que están
organizados en cooperativas o federaciones; no contamos con una renovación de
vías ni estudios que te permitan hacer intervenciones; no tenemos zonas
peatonales donde se resguarde el espacio y los derechos del peatón; es por ello
que seguimos denunciando este problema como uno de los que necesitamos resolver
con mayor urgencia.
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