STALIN GONZALEZ

Sin descuidos...

STALIN GONZÁLEZ |  EL UNIVERSAL

16 de Septiembre de 2009

El objetivo es transformar ese rechazo 

en votos que hagan posible un país de libertades

Desde 2006, cuando decidi-mos la participación electoral apoyando la candidatura presidencial de Manuel Rosales, la alternativa democrática trazó un objetivo estratégico: constituirse en mayoría y lograr, por la vía electoral, un nuevo de gobierno. Este nuevo gobierno estaría comprometido a erradicar la demagogia, el derroche, la desinversión y el autoritarismo que ha gobernado a Venezuela en los últimos diez años. Se trata de una propuesta política donde el poder no es objetivo en sí mismo sino -y esto es esencial- un instrumento para generar inclusión social, calidad de vida y bienestar social para nuestro pueblo. Esto sólo se logra apoyando la inversión pública y privada, fortaleciendo la descentralización y generando más y mejor democracia. 

Un objetivo estratégico como el señalado supone varios objetivos tácticos, entre ellos, alcanzar la mayor cantidad posible de espacios de participación política. En ese sentido, al lado de la movilización de calle, la lucha en las comunidades, en los gremios y en los sindicatos, la lucha jurídica y la denuncia de los múltiples atropellos y la mala gestión de gobierno en todos los sectores del país debe estar la organización política y social, así como, la participación electoral para acumular fuerzas y triunfar. En relación con esto último, es imperativo prepararnos para los procesos electorales de 2010, que están muchos más cerca de lo que algunos piensan. 

La primera tarea de cara a las elecciones legislativas y municipales de 2010 es garantizar la participación de los jóvenes. Debemos trabajar por la inclusión en el Registro Electoral permanente de los casi 400.000 nuevos votantes que el Gobierno, a través del CNE, no permitió que votaran en el referéndum de la enmienda constitucional. De aquí al año próximo esta cifra será muy superior. 

La tarea no es sólo que motivemos la inscripción de nuevos votantes, sino también conminar al CNE que genere condiciones que faciliten la participación política de los nuevos votantes. Desde ya solicitamos al CNE, no en tono de petición sino de exigencia, que promueva una campaña masiva de llamado a los jóvenes a inscribirse en el REP y la inmediata apertura de puntos destinados a tal fin en todas las universidades, colegios e institutos universitarios, en los cines, en los centros comerciales y en las paradas de transporte público.

A nosotros, a través de los gremios estudiantiles, las sociedades de padres y representantes, las organizaciones vecinales y comunitarias, los partidos políticos entre otras organizaciones, sin abandonar nuestras luchas, nos toca asumir el reto de estimular, favorecer y organizar la inscripción de los nuevos votantes en el REP. El rechazo al Gobierno en todos los sectores de la sociedad es visible. Pero en los jóvenes es aún más. La pésima gestión y la pérdida de democracia les arrebata el futuro. Por tanto, el objetivo táctico es transformar ese rechazo en votos que hagan posible un país de libertades y justicia social.