viernes, 26 de septiembre de 2014

Gobierno sin culpas

STALIN GONZÁLEZ / EL COLUMNERO
26 de Septiembre de 2014

 El día de hoy usted  si despertó en algún lugar de Venezuela tiene la certeza que pasara parte de su tiempo buscando alguna medicina, algún alimento o algún artículo de higiene personal; en esa búsqueda también estará atento a que si consigue algunos de estos artículos no podrá avisarle a sus amigos en público, porque con seguridad podría ser robado. También sabe que al finalizar esta jornada y llegar a su casa, ésta probablemente este sin luz o sin agua o sin ambos.

Esta situación denigrante a la que lo han sometido a usted y a todos los venezolanos, los responsables de la gestión de todo aquello de lo que carecemos tienen interesantes respuestas. La abrumadora escasez de cosas tan elementales como las medicinas o los alimentos, el causante son los maleantes, las mafias, los conspiradores, usted porque consume mucho, la burguesía, por supuesto de la mano con el imperio.

La falta de los servicios básicos  ha sido causada por una iguana, tiros al blanco, continuos saboteos y macabros empleados que han decidido quebrar la plataforma de ambas empresas.  De igual forma la emergencia sanitaria que atraviesa los hospitales del país se debe en primer orden a  una guerra bacteriológica y en segundo orden a las políticas de “la cuarta”.

Es decir, tras quince años en manos de una opción política los responsables de todas estas carencias se deben a todos menos a quienes nos gobierna. No solo ello, sino que  la iguana, los cajeros del supermercado, usted que insiste en comer, medicarse y bañarse tienen que ser los protagonistas de insultos, degradaciones y múltiples historias conspirativas porque deja en evidencia un modelo ineficiente.

La culpa de esta crisis social en la que estamos sometidos cada uno  de los venezolanos tiene un solo culpable y no hay propaganda, cadena u  amenaza que pueda disimular esta realidad.  el gobierno aún está a tiempo de redimirse con usted y con todos los venezolanos, puede pedirle disculpas por acusarle de acaparador, bachaquero, comerciante corrupto o empleado saboteador; puede asumir su responsabilidad en este caos en que nos ha sumido a todos y puede también pensar en algunos correctivos para mejorar la situación.

También usted puede, en caso que insista en guerras, conspiraciones y asumirse en un gobierno sin culpas,  manifestar, organizarse y reclamar incesantemente por un mejor país y en un futuro por  otro gobierno.  

viernes, 19 de septiembre de 2014

Asamblea a oscuras


STALIN GONZÁLEZ | ULTIMAS NOTICIAS
19 de Septiembre de 2014
El país requiere recuperar la calidad democrática, recuperar el ejercicio deliberativo tanto dentro de la Asamblea Nacional como fuera de ella
Dadas las características de nuestra democracia, según lo que consagra la Constitución, nuestras instituciones políticas deben hacer especial énfasis en la participación ciudadana y la principal vía para que esto sea posible es la transparencia.

El acceso a la información, fundamental para un ejercicio transparente y democrático, tiene muchos obstáculos en las instituciones públicas venezolanas. Al hablar de la Asamblea Nacional, el orden del día, los créditos e incluso el diario de debate resulta para un parlamentario en funciones (al menos de la oposición) complicado de acceder, por lo que a un ciudadano común conseguir información le resulta casi imposible.

La falta de agenda posibilita anteponer los intereses del partido, de la bancada y del presidente a los intereses nacionales. Asimismo, la falta de fiscalización nos ha llevado a un crecimiento exagerado del gasto público, tanto que este año gastaremos el doble de lo que gastamos el año pasado y ninguno de los venezolanos sabrá a ciencia cierta el destino de todos esos recursos.

El deber de los parlamentarios debe ser ejercer un contrapeso al gobierno ejecutivo, pero actualmente es la audiencia dócil del líder de turno, el ejercicio dialogante es cada vez más sordo y el Poder Legislativo cada día está más sometido al líder del partido oficial. 

La opacidad gubernamental posibilita un poder sin control y ello no es democrático ni participativo ni protagónico. La labor del legislativo es legislar, controlar y ser la correa de transmisión de la sociedad civil. El país requiere recuperar la calidad democrática, recuperar el ejercicio deliberativo tanto dentro de la Asamblea Nacional como fuera de ella.

Un país que se denomina participativo y protagónico debe perfilar sus instituciones a la inclusión de la sociedad civil en sus deliberaciones, debe poder acceder a su agenda, a sus gastos y a sus responsabilidades. De la apertura de la Asamblea depende retomar el control del gasto y la gestión pública y la recuperación de la institucionalidad legislativa es la vía para lograrlo. 

Creo que tenemos una deuda por delante con el sistema democrático venezolano y la participación ciudadana es el escenario real y más cercano posible para recuperar lo que hoy está en manos de la opacidad.